La práctica de envolver al bebé recién nacido es muy antigua, durante generaciones las madres la han utilizado para calmar al bebé, al reproducir la sensación de seguridad y calor del vientre materno. En la actualidad existen evidencias médicas que aseguran los beneficios de esta práctica:

Estudios de medicina de la Universidad de Washington (2002) demuestran que los bebés que duermen envueltos en un arrullo tienen un sueño más profundo, y se evita que se despierten constantemente durante el sueño por el llamado "movimiento reflejo del bebe”.

El bebé permanece mas tiempo en la fase REM del sueño (la más reparadora).

Cada vez hay más indicios que señalan que podría ayudar indirectamente a prevenir el SMSL.

Reduce los cólicos y ayuda a que el bebé se tranquilice él solo, recordándole al vientre materno. La tela le permite a tu bebé imitar la posición fetal y deja que mueva sus miembros sin soltarse del arrullo.

Los bebés son incapaces de regular su temperatura, por eso estar arrullados les ayuda a permanecer a la temperatura adecuada.  La utilización de la tela de Bambú tiene numerosos beneficios. Tiene funciones antibacterianas, es una fibra termo-reguladora, por lo que envolver al bebé con ella le mantendrá abrigado en invierno y fresco en verano.

El Bambú es una fibra mucho mas transpirable que el algodón, protege de los rayos ultravioleta y reduce

la electricidad estática